sábado, 10 de enero de 2015

The Winter of April nos devela al tráfico humano y sus atrocidades


Actores en una emotiva escena de la obra The Winter of April.
Por Antonio Bones

La compañía teatral Tabula RaSa NYC y Theater for the New City, aunaron esfuerzos durante el mes de diciembre en el este de Manhattan, para traer al tablado una enervante propuesta en donde la condición social de la mujer se ve atropellada por una maquinaria de delincuentes y hechos aberrantes.
El texto compuesto por Ricardo Sarmiento Garuffi expone con ingeniosidad el tema del tráfico sexual o del atropello femenil.  El trabajo dramatúrgico cumple con los requisitos de conflicto y estructura interna, aunque en su despliegue de antecedentes cae en un plano nebuloso.  Los diálogos estallan en cada objetivo que el personaje y sus circunstancias imponen.  Garuffi construye diálogos creíbles que son un portento para la burbuja ficcional de la trama.  El autor recrea la ambientación de la pieza en la playa Gilgo, Long Island, Nueva York, y en diversos escenarios conforme avanza la obra.  La historia se nutre del espeluznante hallazgo de una fosa común (año 2010), en donde quedaron sepultadas trabajadoras de la prostitución o, presuntamente, desertoras familiares.  Nos parece que la presentación de monodramas o escenas que componen el universo dramatúrgico de The Winter of April explican con arrojo la problemática social de la mujer, y cómo el entorno logra succionarlas hacia un agujero habitado por situaciones funestas.  La pieza es un trabajo que se mantiene en constante movimiento creando expectativas y tensión.  ¿Qué mejor despliegue para una velada teatral?  Todo el universo dramatúrgico queda matizado por un estilo que persisten en nombrar realismo fantástico.  La fusión de estilos adoptados, a nuestro juicio, podrían ser el teatro social y el teatro experimental dada las aportaciones de efectos multimedia, inclusión del circo Le Bad Ton Futuriste, además de otros recursos técnicos y de expresión corporal.  Conviene una revisión global para ir modificando con miras a futuras presentaciones.  Aunque no es psicoteatro, ni dramaterapia, ni teatro de sanación The Winter of April  y TabulaRasa apelan a los sentidos para agudizar a la conciencia con el objeto de incitar el proceso de curación social.  Establece el director de la obra que el grupo teatral TabulaRasa promulga el poder del teatro,sus recursos audiovisuales y el mismo acto de representación como herramientas sanadoras.
Cada uno de los histriones que componen el elenco cumplieron a cabalidad con sus roles: Lorena Ayub, Jorge Luis Berríos, Ramiro Antonio Sandoval (quién funge como director), María García, Bum Ki-Kim, Javier Leñero, Clara Lopera-Sánchez, Fabio Montenegro, John Neiderer, Laura Riveros y Richard Trujillo.  En su despliegue actoral en el rol de Evelyn, Clara Lopera-Sánchez, pudo “agarrar al toro por los cuernos” en cada situación escénica.  Sus inflexiones de voz deleitan, las transiciones son llevadas a la meticulosidad y los desplazamientos resultan ágiles.  Nos sorprendió Jorge Luis Berríos en su personaje tipo.  Se nota un disciplinado estudio de objetivos y acciones fundidas en su depurada actuación.  ¡Palmas de oro a ambos!  La actuación de Sandoval, aunque mínima, totalmente aceptada.  El actor tiene tablas y lo ha demostrado a través de una fructífera carrera actoral.  Es curioso que la mayoría de actores no sean hablantes nativos del inglés o francés y, aún así, manejan los acentos prestados logrando salir airosos.  Hacemos hincapié en que todos los actores están en dominio de sus personajes y eso es encomiable para un grupo teatral hispano en la ciudad de Nueva York.
La dirección y asistencia de dirección fueron impecables.  Sandoval y Carla Blasi  se comprometen con el discurso, el actor y el espectador; tarea titánica.  Imaginamos que el trabajo de mesa y los ensayos teóricos aportaron al éxito que vimos pasar ante nuestros ojos.  Sandoval supo utilizar todos los puntos céntricos del escenario desde una perspectiva estética y funcional para la movilidad de actores.
En la obra de teatro los recursos técnicos pasan a ser pilares del espectáculo, sin ellos, la obra sería un desacierto.  Tanto la músicalización como las proyecciones, composiciones, efectos sonoros, diseño escenográfico, utilería, vestuario, luminotecnia, etc., mantienen el concepto artístico al tope y desplazan al argumento, casi, a un segundo plano.  El trabajo del equipo que componen Boris Acosta (director musical), Bum Ki-Kim (diseñador de escenografía y director técnico), Miguel Rueda (animación), Yosiany Simbaqueba, Giovanni Correa, Domingo Ramos, Ely Beriguette, Rosa Méndez Piña (guardarropía y utilería), es enérgico y óptimo.
The Winter of April es una puerta que invita a la reflexión, es un globo en donde gira la marginalidad para que nos golpee el rostro, es el retrato de las enfermedades sociales que podrían erradicarse si todos nos unimos a extirparlas abogando en pro de la curación y rehabilitación.  The Winter of April es un exhaustivo trabajo que entreteje profesionalismo, dedicación y reflexión.

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